Ya paso...

Vaya, vaya que días estos...

Nostálgica...

suspendida...

alegre...

Sumergida en una experiencia que sin querer, me sobrepaso...y bueno, nada ; solo había que vivirla, porque una de las cosas que he aprendido en esta "mi vida", es que todo lo que me ocurre no puede ser una casualidad, y sin dudas por lo menos para mi, son procesos necesarios y esos procesos hay que experimentarlos a concho, aunque provoquen sismos grado 7.

Cuando se han vivido experiencias intensas, suele suceder que no todos logran desengancharse, "así de rápido" y yo cumplo todos los requisitos en esta ultima situación, me cuesta mucho provocarme el desapego...(aunque lo intento)cuando lo tengo todo casi a punto para emprender vuelo, me atrapo en nostalgias y vuelvo a retomar historias que parece que a la única que involucra es a mi, así es; vivo mis desamores con tanta intensidad , que pareciera que comienzan de nuevo...(raro, ¿verdad?) tampoco uno espera que un día cualquiera, aparezcan ángeles del pasado en el umbral de la puerta. Que así...no se puede...

En todo caso el vivir procesos de cualquier índole ayuda mucho a conocerse, no se si la experiencia enseña, pero a mi por lo menos me mantiene ocupada, y a propósito de ocupada lo mio son las pinturas y aunque no es la gran cosa como para explicarlas, (cosa que no se me a ocurrido) , me refresca bastante el espíritu trabajar en ellas, no se si es porque el lugar donde trabajo es acorde a mis necesidades y provoca una comodidad muy grande estar allí, o es el lugar donde la soledad y yo tranzamos treguas, bueno eso es lo que me provoca el pintar de que a pesar de estar sola, cuando comienzo a pintar me traslado, no se si lo hago emocionalmente o solo mentalmente, pero a la larga hacen un todo, me provoco estados que me alegran bastante, cuando termino una pintura, no es lo que pinte en realidad, si no es lo que me llevo a ello...

No suelo dejar mis procesos a la mitad, me gusta y esto es por una cuestión de carácter empezar y terminar lo que me propongo, a veces; es necesario provocar los finales y aunque suelen ser inesperados, son necesarios, uno no puede ir por la vida gastando sentimientos, estos son escasos y hay que valorarlos ¿o no?

Eso que dije, lo logre resolver cuando pintaba y ese cuadro alguna vez lo voy a agregar a las pinturas que ya tengo en el blog...¿ se han fijado en mis pinturas?...yo cuando las veo y las casi treinta que están en el cuarto donde pinto , me parecen...no se...siempre hay un rostro en ellas, claro que yo las veo detenidamente y siempre encuentro un rostro...esto si que es digno análisis, (¿Freud me aceptaría en su sillón?)cada uno ve lo que quiere ver, lo mismo en una relación, cada uno aporta lo que siente y eso a veces no alcanza para dos y hasta donde yo se...en una relación, son dos los involucrados...bueno de ese tema ya esta bien...tengo energías de sobra para relacionarme con la vida y lo mas agradable es que siempre hay algo que se, que me va a cautivar, no se el día ni la hora y eso lo hace muy especial...porque se que lo que venga solo debe sorprenderme...

La suavidad de esta imagen me estremeció...

Si, de alguna forma cuando los procesos terminan, se produce una calma poética...y es allí cuando de verdad me siento completa.

He aprendido algo muy simple...ahora no voy a creer tan rápido...lo haré a pausas.